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Controlar los nervios

El nerviosismo es una sensación que surge en momentos concretos de manera más o menos recurrente, esta normalmente sucede a lo largo de nuestra vida en casos como a la hora de acudir a una entrevista de trabajo, hablar delante de personas desconocidas o hacer una exposición. 

Se suele confundir las sensaciones causadas por el nerviosismo con la ansiedad, pero existe una gran diferencia entre estas ya que en el nerviosismo los síntomas no son tan intensos y suele ser en un momento puntual que nada más finalizar desaparece y con la ansiedad los síntomas son más prolongados e intensos.

La sensación que producen los nervios es algo con lo que se debe convivir, algunas personas los controlan mejor que otras ya sea por su forma de ser o por estar acostumbrados a este tipo de situaciones. Por ello existen una gran variedad de técnicas que pueden ayudar a calmar los nervios que surgen durante esos momentos concretos.

  • Aprender que la respiración es muy importante:

Ya que nuestro cerebro manda una señal de alerta al captar nuestra respiración más acelerada, para evitarlo debemos adoptar una respiración lenta y acompasada para enviar el mensaje de que todo va bien. Existen ejercicios concretos, como los del tipo de «respiración diafragmática» que pueden ayudarte a relajarte.

  • Ten como hábito la meditación:

Es una gran ayuda para controlar los nervios, está debe practicarse de manera frecuente. Se ha comprobado que la gente que práctica meditación tienen más facilidad para controlar sus emociones y lo que les preocupa.

Existen diversas técnicas de meditación, como la meditación en movimiento, el mindfulness, verte desde el exterior, etc. También se puede practicar el crear una imagen mental que tu cerebro asociara con una sensación de tranquilidad.

     

    • Realiza deporte:

    También se debe de tener una rutina frecuente como en el caso de la meditación ya que cuando se práctica deporte nuestro cuerpo produce endorfinas, estás ayudan a disminuir la tensión y nos da sensaciones como la felicidad y satisfacción.

    • No sigas a tus pensamientos:

    Es decir, cuestiónalos, ya que nuestra mente crea escenas mucho más exageradas de lo que está sucediendo y no ayuda para nada a nuestro estado emocional. Un buen consejo para controlar el nerviosismo sería cuestionarse las pocas probabilidades de que suceda justamente lo peor de lo que nos estamos imaginando, es muy importante recordar que solamente es una exageración de nuestra mente.

    • Tomate un buen descanso:

    Ten buenos hábitos de sueño, es decir, no hay que desvelarse mirando la televisión o el móvil si al día siguiente se tiene que madrugar para realizar tareas importantes. Por ello es importante acostarse temprano para tener una rutina tranquila la mañana siguiente.

    • Reconoce lo que sientes:

    Identifica por qué razón en particular han surgido los nervios y enfrenta la situación, ya que el creer en uno mismo te hace ganar confianza y sentirte mejor.

     

    • Se uno con la naturaleza:

    Puedes dar un paseo por lugares tranquilos y silenciosos con vegetación, sentarte o realizar actividades que te relajen. Es mucho mejor ir a lugares como pueblos, ya que un estudio de la Universidad de Stanford demostró que las personas que van a lugares con naturaleza muestran menos estrés que las que están en ciudades. Uno de los países que tiene rutas naturales y las que se consideran terapéuticas sería Japón.

    • No lo tengas todo controlado, ¡Improvisa!

    El intentar tenerlo todo controlado más que tranquilizar lo que hace es ponernos más nerviosos. Se puede intentar ensayar, pero hay que asumir que no todo puede estar controlado. Por ejemplo, si tienes una presentación es normal prepararte un esquema de lo esencial pero no es necesario intentar aprenderse al pie de la letra todo lo que vas a exponer ya que más que ayudar lo que probablemente pase es que te quedes en blanco.

     

    • Opta por el humor:

    Buscar el lado cómico nos ayuda a afrontar el nerviosismo y aligera la situación que estés afrontando a través del humor e ingenio. El humor también puede ser entrenado para que surja de manera espontánea. Actualmente existen talleres como el de risoterapia que ayudan a disfrutar de los beneficios que nos provoca la risa, como reducir el estrés, aumentar creatividad, etc.

    • Motívate con un premio.

    En momentos donde debes de afrontar una situación difícil puedes animarte utilizando una recompensa que obtendrás cuando superes esa situación. En este método te ayuda en momentos de nerviosismo ya que al imaginar el premio tu mente lo asocia con pensamientos positivos, como alegría y felicidad. Y otro truco para afrontar los nervios también sería en imaginar que consejos le darías a alguien conocido en esa misma situación.

    Si después de seguir estos consejos y la ansiedad no desaparece, aunque sea levemente, entonces la solución sería pedir ayuda. Los especialistas para este tipo de casos más complicados serían los psicólogos, ya que te ayudan a entender lo que estás sintiendo, por qué y cómo resolverlo.